Rutas

publicaciones

Imagen de un cartel que dice que las Malvinas son argentinas, haciendo referencia a la Guerra de las Malvinas.

¿Islas Malvinas o Falkland? Descubre la historia de la Guerra de las Malvinas

Publicado em:
Compartir este contenido!

La Guerra de las Malvinas fue un conflicto entre Argentina y el Reino Unido que ocurrió a finales del siglo XX, entre abril y junio de 1982. El objetivo de la disputa era el archipiélago de más de 770 islas conocido como las Islas Malvinas o las Falkland.

En medio del contexto de la bipolarización internacional de la década de 1980 y los propios conflictos de los países involucrados, la guerra, con victoria británica, tuvo un significado importante para las respectivas fuerzas militares y las relaciones internacionales a nivel mundial.

Para entender cómo la Guerra de las Malvinas revela posibles correlaciones entre política, economía y soberanía nacional hasta el día de hoy, ¡sigue con Politize! y acompaña el texto a continuación.

Islas Malvinas: conoce el territorio

Imagen de la bandera de las Islas Malvinas
Bandera de las Islas Malvinas. Imagen: Pixabay

El territorio de las Islas Malvinas (para los argentinos) o Falkland (para los británicos) está ubicado en el Atlántico Sur, reconocido oficialmente como territorio ultramarino del Reino Unido. Tiene una extensión de alrededor de 12.000 km² y una población de aproximadamente 3.600 habitantes. Con una baja densidad demográfica, de 0,30 hab/km², la región cuenta con uno de los mayores ingresos per cápita del mundo, alrededor de 70.000 USD, lo que equivale a 355.000 BRL.

La economía de las Islas gira en torno a la pesca y la cría de ovejas, prácticas que permiten la exportación de productos marinos (como el calamar, principalmente) y también el comercio de lana, conocida como “lana Falkland”. España es uno de sus principales socios comerciales, con un papel destacado en la explotación potencial de petróleo y gas natural en el territorio.

Es importante destacar que la región tiene su propia moneda, la libra de las Falklands. Sin embargo, esta especie refleja el vínculo del territorio con el Reino Unido, ya que lleva impresa la imagen de la difunta Reina Isabel II.

Consideradas como el “portal hacia la Antártida”, las Islas tienen bajos niveles de criminalidad y un fuerte incentivo a la salud y educación gratuitas. La cultura británica predomina en la región, ya que más del 90% de la población habla inglés, frente a menos del 10% que habla español.

La población del archipiélago está compuesta en su mayoría por extranjeros y la mayoría de los nativos descienden de inmigrantes escoceses, irlandeses e ingleses. Denominados “Kelpers”, en referencia a un alga muy presente en el ecosistema natural de las aguas de la zona, los ciudadanos de las Islas Malvinas habitan mayormente la región de su capital, Stanley.

La Guerra de Malvinas: antecedentes, motivaciones y consecuencias

Antecedentes de la Guerra de las Malvinas: la historia de la colonización

Aunque la Guerra de las Malvinas tuvo su detonante el 2 de abril de 1982, la disputa por la región de las Islas comenzó mucho antes, a partir del periodo de colonización del continente americano, entre los siglos XV y XVI. El primer registro de dominio sobre el territorio data de 1520, con la llegada del portugués Fernão de Magalhães a la región.

En el contexto de las disputas territoriales entre España y Portugal, se firmó el Tratado de Tordesillas como referencia para la división del continente americano entre las dos potencias europeas. Considerados pioneros en el proceso de las Grandes Navegaciones, los países ibéricos comenzaron a lidiar con el interés de otros Estados europeos por sus posesiones de tierras en el “Nuevo Mundo”.

Así, en 1592 aparece el primer registro de dominio inglés sobre las Islas, con el navegante John Davis y la disputa por el territorio con España. A medida que se intensificaron las luchas por la región, los años siguientes en la historia de las Islas Malvinas cuentan la narrativa de la colonización en América, donde diferentes países europeos comenzaron a reclamar los territorios encontrados como propios, con derechos de uso y explotación.

En 1600, fue el turno de los Países Bajos de reclamar y apoderarse de la región, disputándola con los demás interesados. A esto le siguió un nuevo intento inglés en 1692, con el británico John Strong, quien fue el primero en desembarcar realmente en las Islas.

Fue él quien nombró el Estrecho de Falkland, en honor al patrocinador de su viaje, el Vizconde de FalklandYa en el siglo XVIII, en 1764, Francia entró en las disputas territoriales, llamando a la región Les Malouines, nombre que serviría de referencia para Las Malvinas en los próximos años de la historia del territorio. En 1811, la región volvió a estar bajo control español.

Sin embargo, inserta en el contexto de la independencia de América Latina, el dominio del espacio quedó en manos del territorio denominado el Virreinato del Río de la Plata, que dio origen a la Argentina como país independiente y, de esta manera, a la conexión entre ese Estado y las actuales Islas Malvinas.
Finalmente, en 1833, el Reino Unido retomó la posesión de las Islas, logrando mantener el control del territorio hasta hoy.

El conflicto entre Argentina e Inglaterra

Con las Islas Malvinas oficialmente como un territorio británico fuera del continente europeo pero, al mismo tiempo, con herencias de dominación argentina, el conflicto comenzó en 1982, con la invasión de tropas argentinas en la región.

Con el objetivo de reconquistar las tierras Malvinas, Argentina justificó la acción militar como un deber nacionalista, una misión patriótica que respetaba las pretensiones del país desde el siglo XIX.

Durante el primer mes de guerra, el poder argentino prevaleció sobre la región y recibió un fuerte apoyo de la población argentina. Esta, viviendo bajo un régimen militar encabezado por el General Leopoldo Galtieri, veía en las acciones una valorización nacional. Así, apoyaban la operación, incluso si también representaba un intento del presidente de simbolizar la importancia de la unidad nacional en medio de graves crisis económicas y de legitimidad política en Argentina.

Llamada “Operación Rosario”, la estrategia de reconquista argentina intentaba consolidar al país como una potencia militar en América y rescatar su carácter histórico.

La respuesta del Reino Unido llegó en mayo de 1982, cuando fuerzas militares británicas desembarcaron en las Islas y se enfrentaron al ejército argentino. Tras diversas batallas y un saldo de más de 600 soldados muertos, Argentina firmó su rendición, poniendo fin al conflicto anglo-argentino con victoria británica.

Las Batallas de Goose Green, Monte Longdon y Wireless Ridge son destacadas en el conflicto, ya que representan el primer enfrentamiento, la primera muerte de civiles y la última batalla, respectivamente.

Principales consecuencias de la Guerra de Malvinas

Tras la victoria británica sobre las tropas argentinas, las Islas Malvinas continuaron consolidándose como un territorio ultramarino británico. Con un saldo de casi 700 muertos en el conflicto, los soldados participantes fueron obligados a firmar pactos de silencio por parte de sus países, para que los hechos ocurridos durante la Guerra no fueran comentados ni divulgados en los medios locales e internacionales.

Este factor resultó en un promedio de 400 suicidios de exsoldados en el período posterior a la guerra, debido a las consecuencias para la salud mental y psicológica de los involucrados.

Para los ciudadanos de las Islas Malvinas, al final del conflicto se les otorgó plena ciudadanía británica y se consolidó el gobierno en la región. Así, hasta hoy se mantiene un Parlamento independiente y las áreas de Relaciones Exteriores y Defensa bajo el mando del Reino Unido.

De esta manera, hubo un aumento del interés británico por las Islas después del conflicto, tanto social, político como económicamente.

El contexto geopolítico durante la Guerra de las Malvinas

Para entender el desarrollo del conflicto en las Malvinas, es necesario destacar tres contextos políticos globales que estaban en juego. Mientras todo el escenario internacional estaba involucrado en la Guerra Fría y la bipolarización del mundo entre Estados Unidos y la Unión Soviética, Argentina vivía bajo un régimen militar dictatorial y el Reino Unido bajo el liderazgo conservador de Margareth Thatcher.

Con Ronald Reagan como presidente de Estados Unidos y aliado internacional del Reino Unido, la posibilidad de que el Reino Unido perdiera la posesión de las Islas Malvinas representaba una derrota para la influencia del bloque capitalista en la Guerra Fría.

Al mismo tiempo, existía el temor de que las influencias soviéticas llegaran a América, alcanzando el territorio que ya estaba debilitado por las disputas en el Atlántico Sur y su potencial geográfico, considerando su ubicación y capacidad de salida marítima y aérea.

Con el fin de la guerra y la victoria británica, el escenario internacional presenció el fortalecimiento de Thatcher y sus políticas como Primera Ministra del Reino Unido, mientras que, por otro lado, la dictadura en Argentina se debilitó. El presidente argentino Leopoldo Galtieri renunció el 1 de julio de ese mismo año, iniciándose el regreso a la democracia en Argentina.

¿Islas Malvinas ou Falkland?

Hasta el día de hoy, es posible encontrar vestigios de la disputa entre Argentina y el Reino Unido por las Islas Malvinas. El principal elemento se encuentra en el propio idioma, donde muchas ciudades, puntos turísticos y el nombre de la región siguen siendo objeto de disputa informal. Port Stanley y Puerto Argentino, para referirse a la capital, ejemplifican la situación conflictiva.

En 2013, debido a las consecuencias del conflicto, se realizó un plebiscito con la población de las Islas, para decidir a quién pertenecía la soberanía del territorio. Con un resultado favorable para los británicos, lo que sigue en debate es la noción de autodeterminación, ya que los ciudadanos de las Islas se identifican con la cultura británica, y la integridad territorial, un argumento defendido por los argentinos.

Recientemente, el presidente actual de Argentina, Javier Milei, reafirmó en un discurso que la reconquista de las Malvinas es uno de sus objetivos como líder de la nación, como aún se establece en la Constitución del país.

El conflicto, aunque limitado al territorio de las Islas Malvinas, tuvo consecuencias para todo el escenario internacional. Al movilizar el sentimiento de pertenencia nacional, los principios de colonización y el potencial económico de la región, la Guerra de las Malvinas ilustra cómo los conflictos sociales son el resultado de procesos históricos complejos. Para comprenderlos, es necesario un enfoque amplio sobre todos los elementos que contribuyen a su ocurrencia.

Referências:

Compartilhe este conteúdo!

¿Querés recibir boletines por correo electrónico con nuestros contenidos?

Como estamos comenzando nuestra operación de producción de contenidos en español, aún no hemos definido una fecha exacta para empezar a enviar boletines por correo electrónico, ¡pero ya puedes dejar registrado tu interés para el futuro!

Scroll al inicio

Caminos

publicaciones